Andalucía es la quinta región con peor resultado.
Redaccion.-Los escolares de Málaga no están entre los más brillantes de España. Pese al esfuerzo de los docentes, el alumnado malagueño tiene una tasa de fracaso escolar muy por encima del 10% máximo aceptable para la Unión Europea.
Y es que el 34,5% de los estudiantes de la provincia no lograron superar la ESO en 2006 (último dato disponible), según la información facilitada por el Ministerio de Educación y el INE publicados recientemente por la revista Magisterio.
Las cifras sitúan a Málaga muy alejada del 11,9% de tasa de fracaso escolar que se registra en Guipúzcoa, del 16,5% de Asturias o del 16,7% de Soria, las tres primeras de la lista.
Las cifras sitúan a Málaga muy alejada del 11,9% de tasa de fracaso escolar que se registra en Guipúzcoa, del 16,5% de Asturias o del 16,7% de Soria, las tres primeras de la lista.
Comparativas
La situación es parecida a la de 2004, cuando la tasa de fracaso se situaba en Málaga en un 33,4%. La evolución desde 2002, sin embargo, no ha ido descendiendo. Mientras ese año la tasa era del 32,7%, en 2003 bajó al 31,5%.
El año 2005 las cifras volvieron a subir al 35,6% para descender 1,1 puntos el año siguiente. Estos datos reflejan que en cinco años se ha incrementado en 1,8 puntos el fracaso escolar.
Málaga es la cuarta provincia andaluza donde este problema tiene más envergadura, tras Sevilla (35,9%), Huelva (36,7%) y Almería (39,4%). Por debajo están Cádiz (32,7%), Córdoba (32,6%), Granada (30,3%) y Jaén (30,2%).
Granada, Jaén, Córdoba, Cádiz y Huelva han logrado reducir entre 0,5 y 2,5 puntos la tasa de fracaso desde 2002. Sumando estos resultados, Andalucía se sitúa en esta materia entre las peores comunidades, algo que corrobora el estudio de la Fundación de Cajas de Ahorro, en el que se recoge que la región está en quinta posición con una tasa total del 34% en 2006 frente al 26,7% logrado cuatro años atrás, cuando la media española de es del 30,8%.
Andalucía, de este modo, queda muy lejos de Asturias (16,5%) o el País Vasco (17%), aunque mejor que Ceuta (52%), Valencia (39,7%), Baleares (38%) y Canarias (35,9%). Estos datos han sido calculados por Magisterio a partir de los datos del Ministerio y de la nueva estimación provincial de la población actual facilitada por el INE.
El año 2005 las cifras volvieron a subir al 35,6% para descender 1,1 puntos el año siguiente. Estos datos reflejan que en cinco años se ha incrementado en 1,8 puntos el fracaso escolar.
Málaga es la cuarta provincia andaluza donde este problema tiene más envergadura, tras Sevilla (35,9%), Huelva (36,7%) y Almería (39,4%). Por debajo están Cádiz (32,7%), Córdoba (32,6%), Granada (30,3%) y Jaén (30,2%).
Granada, Jaén, Córdoba, Cádiz y Huelva han logrado reducir entre 0,5 y 2,5 puntos la tasa de fracaso desde 2002. Sumando estos resultados, Andalucía se sitúa en esta materia entre las peores comunidades, algo que corrobora el estudio de la Fundación de Cajas de Ahorro, en el que se recoge que la región está en quinta posición con una tasa total del 34% en 2006 frente al 26,7% logrado cuatro años atrás, cuando la media española de es del 30,8%.
Andalucía, de este modo, queda muy lejos de Asturias (16,5%) o el País Vasco (17%), aunque mejor que Ceuta (52%), Valencia (39,7%), Baleares (38%) y Canarias (35,9%). Estos datos han sido calculados por Magisterio a partir de los datos del Ministerio y de la nueva estimación provincial de la población actual facilitada por el INE.
Ellas fracasan menos
El fracaso escolar está marcado por el sexo. Mientras en las malagueñas se sitúa en el 25,8%, en los chicos se alcanza el 42,6%. La diferencia entre los suspensos de ellos y ellas asciende a 16,9 puntos, está tres puntos por encima de la media española.
Dista mucho de los 2,5 puntos de Palencia, aunque en el lado opuesto está, por ejemplo, Cáceres, donde el fracaso masculino (45%) duplica al femenino (22,6%). Una alumna soriana tiene un 7% de probabilidades de fracasar, frente al 52% de un alicantino.
Dista mucho de los 2,5 puntos de Palencia, aunque en el lado opuesto está, por ejemplo, Cáceres, donde el fracaso masculino (45%) duplica al femenino (22,6%). Una alumna soriana tiene un 7% de probabilidades de fracasar, frente al 52% de un alicantino.
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